Uno de los productos más demandados en la cosmética natural es la manteca de karité. Lo habitual es encontrar este ingrediente mezclado con las cremas corporales, faciales o incluso en productos para el cabello. Pero también la puedes encontrar en su formato puro, sin mezclas, para poder aprovechar directamente todas sus propiedades.

Pero ¿qué es la manteca de karité? Es una grasa que procede de las semillas de las nueces del árbol de karité, originario de la parte tropical de África. Para obtener la manteca se muelen las semillas y se hierven en agua. La grasa que flotará de esta mezcla, al enfriarse se convertirá en una especie de mantequilla amarillenta con un fuerte olor a nuez, que será la manteca que conocemos todos. Si la vieras con un tono más blanquecino y sin ese olor característico, es que habrá sido refinada para poder adaptarla a todos los públicos. 

Entre los 28 y los 35 grados se funde, lo que la hace perfecta para conservarla de manera sólida y con el calor corporal, el de las manos al manipularla, haremos que se pueda aplicar donde lo necesitemos. 

Composición de la manteca de karité

Depende de la procedencia del árbol la composición de ácidos grasos puede varias, pero ronda la siguiente: 

Ácido oleico: 40 a 60% (omega 9).

Esteárico: 30 a 50%.

Linolénico: 3 a 10% (omega 6).

Palmítico: 2 a 7%.

Araquídico: más de 2%.

Además de estos estos ácidos grasos que le dan esa untuosidad y poder de hidratación, podemos encontrar vitamina A (antioxidantes), D, E y F; alcoholes terpénicos, que son antiinflamatorios; y fitoesteroles, que protegen de los rayos ultravioletas.

Propiedades de la manteca de karité

Es una de las sustancias que más se usan en la cosmética por todas las propiedades que aporta a nuestro cuerpo. Estas son algunas de las propiedades que se le atribuyen:

  • Hidratación. Al ser un producto con tantos ácidos grasos en su composición hace que su poder de hidratar tanto la piel como el cabello sea muy elevado. Es ideal para aquellas pieles secas y para reducir las arrugas del contorno de ojos. A pesar de ser un producto tan graso también pueden usarlo pieles con tendencia grasa porque funciona como seborregulador. 
  • Nutrición. La presencia de las vitaminas en su composición natural hacen que sea uno de los productos más nutritivos para piel y cabello. Hacen que luzcan con un aspecto mucho más sano. 
  • Antioxidante. La vitamina A, unida a los fitoesteroles, hacen de la manteca de karité una gran aliada contra el envejecimiento prematuro de la piel. Crea una barrera contra los radicales libres y los rayos ultravioletas protegiendo el cabello y la piel de ellos. 
  • Ayuda a la regeneración celular. Por ello es muy utilizada en el tratamiento de cicatrices y pequeñas heridas, para evitar que se queden las marcas de ellas. 

Usos de la manteca de karité

Es un producto muy versátil que puedes utilizar para mejorar muchas partes de tu cuerpo, pero vamos a nombrar aquellos que nos parecen más interesantes. Así, más adelante, podremos hablar de los productos que tenemos en MON para aprovechar las ventajas de la manteca de karité.

Para pieles secas 

Su poder de hidratación y nutrición es ideal para este tipo de pieles. Para notar mejoras deberás aplicar dos veces al día la manteca de karité con un suave masaje, hasta su absorción. Notarás los cambios en pocos días. 

Para tener la piel fina y suave

Una buena manera de conseguirlo es vertiendo una cucharada de la manteca de karité en una bañera llena de agua. Verás cómo se extiende una fina capa en tu cuerpo al meterte en el agua, de esta manera quedará tu piel muy suave e hidratada. Además, mientras puedes aprovechar el poder relajante de un baño.

Como crema solar

La manteca de karité tiene una pequeña cantidad de SPF, es decir de protección solar, lo que la hace ideal para protegernos de los primeros rayos de sol. También nos sirve cuando ya estamos bronceados y queremos seguir protegiendo nuestra piel, e incluso el cabello. 

Tratamiento para fortalecer las uñas

La aplicación de la manteca de karité en las uñas hace que estas se vuelvan más fuertes y menos quebradizas. Además, aumentarás su brillo y se verán más saludables.

Embarazo y postparto

La piel de las mujeres en el embarazo y en el postparto sufre mucho por todo lo que se tiene que estirar en el proceso de crecimiento del bebé y la posterior lactancia. Durante la gestación previene de la aparición de las estrías dándole a la piel ese aporte extra de hidratación y nutrición que necesita. Y durante el postparto, además de prevenir las estrías del pecho, ayuda a prevenir la aparición de las grietas al dar el pecho.

Protege la piel del bebé

Los recién nacidos tienen una piel muy sensible y delicada que hay que cuidar y mimar. La manteca de karité se alía con los padres para ayudar en la prevención y alivio de las irritaciones del pañal y todo aquello que le pueda rozar. 

Prevención y regeneración en herpes

Previene su formación, la de llagas que se asocian a él y regenera las heridas que se hayan podido causar. 

Como bálsamo labial

Con los cambio climatológicos, el frío intenso, el estrés o el llevar la mascarilla muchas horas, los labios sufren mucho y pueden aparecer las temidas grietas. La manteca de karité ayuda a regenerar la piel y le aporta más elasticidad. Solo hay que poner un poco sobre los labios y las grietas desaparecerán rápidamente.

Tratamiento de callos

No sirve para que desaparezcan pero sí para ablandarlos y poder retirarlos de manera más sencilla, y así además nos molestan menos. También ayuda en la cura de las ampollas.

Previene la irritación

Al igual que en la piel de los bebés es muy efectiva también en aquellas zonas más sensibles y después del afeitado. De esta manera calmamos la zona y la regeneramos. 

Para los triatletas es una buena aliada

Estos deportistas suelen tener muchos problemas de irritaciones por el sudor mezclado con el agua tras la natación. Si se pone un poco de manteca en la zona por la noche a la mañana siguiente habrán desaparecido todas las rojeces. 

Apto para SQM

Las personas con SQM (sensibilidad química múltiple) pueden usarlo sin problemas como cosmético diario.

Manteca de karité para el pelo

Cuando se habla de este producto se suele pensar que solo sirve para la hidratación de la piel, pero también es un potente aliado para el cuidado de nuestro cabello.

Como ya hemos mencionado en sus propiedades genéricas, es un potente escudo contra los rayos ultravioletas, lo que lo protegen de un prematuro envejecimiento y le dan el brillo de un pelo sano. También lo aísla del calor que se le aplica con los secadores y planchas del cabello, crea una capa protectora si lo aplicas. Es un potente humectante gracias a todas las vitaminas que tiene en su composición, lo que le aporta vitalidad y resta fragilidad al pelo. Y gracias a su gran poder regenerador e hidratante ayuda a proteger el cuero cabelludo y lo regenera, evitando así rojeces, tiranteces e incluso caspa.

Su uso para el cabello es variado. Se puede utilizar la manteca de karité pura, directamente sobre él. Solo hay que ir probando lo que se necesita. Puede que sea para una hidratación profunda del pelo, a modo de mascarilla capilar, o que se necesite para definir los rizos o dejar de tener el cabello encrespado. Lo mejor es ir probando poco a poco y aplicando de mitad del cabello a las puntas. Para usarlo como mascarilla debes untar el pelo con la manteca y envolverlo con una toalla durante 20 minutos, después lávalo con tu champú de

MON y verás lo nutrido que queda el cabello. 
Pero también se pueden usar champús con este componente para regenerar cabellos secos y dañados por el tiempo o las condiciones climatológicas. Es el caso de nuestro champú de manteca de karité, que le aportará a tu pelo una hidratación extra al cuero cabelludo dándole más suavidad y brillo a tu pelo gracias a las propiedades nutritivas del Karité.

Además, está formulado junto con el aceite esencial de Ylang Ylang, que ayuda con la secreción del sebo del cuero cabelludo. 

La manteca de karité para la piel de nuestro cuerpo

Es una gran aliada ya que la capa protectora que se forma ayuda a mantener las moléculas del agua, lo que genera una mayor hidratación de la piel. Ayuda a formar una barrera natural contra la deshidratación y las agresiones externas.

La manteca pura de karité hay que aplicarla en pequeñas cantidades porque cunde mucho. Puedes aplicarla directamente en la piel, pero ten en cuenta que al contacto con nuestra temperatura corporal tiene textura grasa. Es muy recomendable para talones agrietados e, incluso, como bálsamo labial. 

Pero también puedes usarla mezclada con otros productos del día a día para sacarle todo el partido al poder de la manteca de karité. 

Leche corporal. Este producto de MON tiene, además de las propiedades del karité, las del aceite de argán y la rosa mosqueta, que nutren en profundidad y regeneran la piel. Está mezclada también con aceites esenciales de Lavanda, Mirra, Manzanilla, Árbol del Té, Cedro, Limón, Naranja y extracto de Té Verde. Es ideal para pieles secas y deshidratadas.

Gel de baño. Está diseñado para usarlo todos los días y darle un aporte extra de nutrición e hidratación a la piel. Además, los aceites esenciales, los mismos que la leche corporal, hacen de este gel de baño apto para la higiene diaria de toda la familia, incluso de aquellos con pieles delicadas. 

Crema facial. La cara es una de las zonas que más sufren con las condiciones ambientales, y es donde más se nos puede notar el paso de la edad, algo que en ocasiones queremos disimular. Este producto está enriquecido con aceite de oliva, lo que hace que aporte un extra de vitamina E, y también con centella asiática, mirra y naranja, que ayudan a proteger la piel de las agresiones externas. 

Crema de manos y pies. Estas dos zonas también son de las que más sufren. Los pies porque soportan todo el peso del cuerpo y los cambios de calzado suele estropearlos mucho. Y las manos están casi todo el tiempo al aire y las condiciones ambientales suelen secarlas mucho. Con este producto, al que además se le añade aceite de almendras que es muy hidratante, se pueden suavizar las manchas de la piel de las manos con las propiedades blanqueantes del limón. 

Y ante cualquier duda sobre las propiedades de la manteca de karité o los productos que hay puedes ponerte en contacto con nosotros y estaremos encantados de ayudarte. Ten en cuenta que, además, todos nuestros productos son naturales y libres de químicos, lo que lo hacen perfectos para cualquier tipo de piel. Eso sí, debes tener en cuenta que una de las contraindicaciones de la manteca de karité es que no pueden usarla aquellos que tienen algún tipo de alergia al látex.