El árbol de té tiene grandes propiedades y en la actualidad se utiliza para multitud de aplicaciones. Este artículo se centrará en su aplicación para prevenir y mitigar los problemas de granitos y del acné.

El aceite de árbol de té tiene origen australiano, aunque desde la década de los 90 se ha extendido su uso. Se obtiene de la destilación de las hojas del árbol Melaleuca alternifolia. Y gracias a sus propiedades antisépticas, antibacterianas y antiinflamatorias su aplicación es la solución natural perfecta para problemas relacionados con la piel.

En la actualidad se utiliza para un montón de afecciones de la piel: eliminación de la caspa y picores del cuero cabelludo, ayuda a la cicatrización, recuperación y limpieza de la piel y también como solución natural para el acné.

Beneficios del aceite de árbol de té para el acné

Flor del árbol del té

Entre los beneficios del aceite de árbol de té destaca la capacidad para combatir e incluso mejorar la apariencia de las pieles con acné. ¿Y porqué es tan efectivo? Porque entre sus propiedades se encuentran:

  • El efecto antibacteriano, que ataca a las bacterias causantes del acné,
  • El efecto antifúngico, que destruye los hongos gracias a su componente activo principal el terpinen-4-ol.
  • El efecto antiinflamatorio, que reduce la inflamación que provocan los ácaros en la piel.

Es la combinación perfecta para reducir el acné con una solución natural. A pesar de la recomendación de no aplicar sustancias grasas a la piel que está afectada por el acné, en este caso el aceite de árbol de té contribuye eficazmente a reducir e incluso eliminar esos molestos y antiestéticos granitos.

Con la aplicación de árbol de té sobre el cutis conseguimos que las espinillas se sequen, puesto que combate las bacterias que hay en ellas. Y además, gracias a una rutina de limpieza diaria se dificulta acumulación de grasa y bacterias que son los responsables de la formación de nuevos granos.

Por último, también hay que destacar el poder cicatrizante que tiene el árbol de té, por lo que se obtienen muy buenos resultados para curar las heridas provocadas al manipular los granitos o cuando se revientan. Es un aliado estupendo para la recuperación de la piel.

Por qué aparece el acné

Los granitos que aparecen por el acné son la consecuencia de una obstrucción de las glándulas de grasa en la piel. Y los factores que lo provocan son de lo más variado. Lo ideal es que cada caso particular sea diagnosticado por un médico dermatólogo.

Las causas más habituales son las siguientes:

  • La edad: aunque hay adultos que padecen de acné, la realidad es que la mayoría de las veces se da en los adolescentes. Y está causado por un aumento de hormonas androgénicas que estimulan la producción de grasa.
  • No mantener la piel limpia: y como consecuencia se obstruyen los poros y la grasa se acumula. Es entonces cuando aumenta la formación de puntos negros y espinillas. Esto incluye los casos en los que el maquillaje no se limpia diariamente.
  • No utilizar productos específicos para cada tipo de piel: hay que elegir las cremas solares, cremas hidratantes y maquillajes en función del tipo de cutis.
  • No tener una alimentación saludable: abusar de las frituras, carbohidratos y dulces afecta a la producción hormonal y puede ser el causante de la acumulación de grasa. En su lugar hay que sustituirlos por una dieta rica en frutas, vegetales y hortalizas. También hidratarse correctamente, tomando suficiente agua.
  • Genética: puede que simplemente tengas propensión a padecer de acné por herencia genética. El tipo de piel y la tendencia a tener granitos es en muchos casos hereditaria.

En todos estos casos, el cuidado de la piel es fundamental para conseguir reducir y finalmente eliminar esos molestos granos, inflamaciones y heridas provocadas por el acné. Y precisamente el aceite de árbol de té es de gran ayuda para conseguirlo de manera natural.

Cómo aplicar el árbol de té en la cara

El aceite de árbol de té se puede aplicar directamente en los granos a tratar. Siempre y cuando no tengas una herida abierta. En cuyo caso no se recomienda aplicarlo directamente y sin diluir.

Y es importante tener en consideración algunos consejos para conseguir buenos resultados. Para ello, debemos preparar el cutis antes de la aplicación limpiando muy bien la cara. Eliminando los restos de polución y grasa.

chica limpiandose la cara en el baño

Para la limpieza os aconsejamos el gel/champu de árbol del te, si lo has leído bien, este gel es una magnífico jabón natural para la limpieza de las pieles grasas.

A continuación, añadir un par de gotas del aceite de árbol de té en un bastoncillo y aplicarlo en el granito. Dejar actuar durante unas horas.

Otra forma de aplicarlo, más cómoda, es con nuestro roll-on “Tree MON anti-acné” , que además de aceite de árbol de té tiene limón, con lo que conseguirás una buena limpieza de la dermis y efecto calmante. Sus propiedades astringentes harán que el poro se cierre para evitar que se llene de suciedad e impurezas. Además, gracias al tamaño pequeño que tiene podrás llevarlo a todos los lados y usarlo cuando lo necesites.

Mascarilla de arcilla verde y árbol de té

Como lo más importante es siempre prevenir, si tienes propensión a que te aparezcan los antiestéticos granitos, no debes olvidar incluir en tu rutina diaria productos que te ayuden a reducir su aparición.

aplicación de una mascarilla de arcilla verde

Te aconsejamos que apliques una gota de aceite esencial de árbol del té sobre el granito y encima un poco de arcilla. Si quieres hacerte una mascarilla completa sobre toda la cara; coge una gasa y empápala con agua de rosas ecológica y unas gotas de aceite esencial de árbol del té. Póntela en el rostro y encima pon una capa de arcilla verde con aloe vera. Esta mascarilla también te irá muy bien para terminar con los granos corporales.

En definitiva, si eres constante en la rutina y tratas a tu piel con productos naturales (evitando los abrasivos) y específicos para el tratamiento del acné conseguirás reducir y eliminar esos horribles granitos y conseguirás una piel mucho más limpia y suave.