Mandarina
De todos los cítricos el aceite esencial de Mandarina es el perfume más delicado. Su nombre proviene de los mandarines de la China. Las mandarinas llegaron a Europa a través de Italia en el siglo XIX. Debe su nombre al hecho de que el fruto constituía un regalo tradicional que se ofrecía a los mandarines de China.
La gente nerviosa, a la que le cueste dormir, debería comer mandarinas después de cenar, ya que contienen bromina (una sustancia natural calmante) y además son muy ricas en vit. C. Dada su acción calmante y tan suave a la vez, es vital tenerlo en casa si tenemos niños peque- ños. Su aceite esencial puede usarse tanto en baños, por su acción calmante, como para problemas estomacales, diluido en aceite de almendras, y realizando masaje sobre el vientre.
La Mandarina que utilizamos en nuestras fórmulas es 100% natural certificado por Cosmos-Ecocert.